La llamativa disposición en forma de L de los armarios no solo llama fuertemente la atención desde el punto de vista óptico, sino que también establece prioridades. Todos los utensilios que se utilizan con mayor frecuencia se encuentran ordenados dentro para poder acceder a ellos fácilmente. Observándolo más de cerca es posible percibir el juego refinado de las superficies de gran calidad: el vidrio mate contrasta con el lacado elegante, y el aspecto metálico discreto con la calidez de la madera.